sábado, 15 de octubre de 2011

Reviews: Drive



Baby, you can drive my car ♫ 


Dime dónde comenzamos, a dónde nos dirigimos, a dónde iremos después. Cuando lleguemos ahí te daré cinco minutos. Pase lo que pase en esos cinco minutos. En cuanto lo decida estarás por tu cuenta. No me siento mientras lo escribes. No me importa tu arma. Yo conduzco. A eso llamo yo, separar el trabajo del placer, aunque la línea se desvirtúa para el protagonista de Drive (2011), la nueva película de Nicolas Winding Refn, a medida que los minutos corren. ¡Acelérele chofer!   






Ryan Gosling interpreta a un solitario conductor de Los Ángeles que tiene una, por así decirlo, vida paralela. De día es doble de riesgo en películas de acción a lo Fast and Furious (Rápido y Furioso, 2011 a 2011) y de noche la juega de pibe de los mandados para la mafia y otros delincuentes, que contrato mediante, lo deja al final del trabajo exclusivamente en condición de conductor, liberándose de toda culpa o conexión futura. Una creciente relación con su vecina Irene (Carey Mulligan) y su pequeño hijo, obligará al conductor a mezclar afectos con trabajos con consecuencias oscuras.

En un principio Drive pinta una mezcla exótica entre Taxi Driver (1976) y The Transporter (El transportador,2002) que se aleja de la exitosa saga de Walker y Diesel por no caer en autos bonitos y llantas gastadas. Algo evidente es la forma en que fue concebido el guión, desconcertante, quizá ellos mismo comenzaron el rodaje no sabiendo bien a que iban. No obstante la película toma forma pasada la mitad, dejando claro que no es una historia sobre autos, tampoco sobre carreras, más bien es sobre la acción de manejar. Las muy bien logradas escenas de manejo, con ronroneo de motores incluido, suben al espectador a dar una vuelta, eso por sobre seguro.





Qué decir de Gosling, un actor todo terreno que puede hacer The Notebook (Diario de una pasión, 2004), pasar por Lars and the real girl (Lars y la chica real, 2007) y llegar hasta aquí. Quizá su personaje genere impaciencia, sus largos silencios, sus sonrisas a medias, mezcladas con algún que otro ataque violento. Gran acierto la banda sonora, que buena música para salir a manejar, mucho sintetizador generador de desnivel e incertidumbre, y ese zumbido casi constante en la mayoría de las escenas, por cierto, original.

Los amantes de las franquicias joystickeras como Drive o Grand Theft Auto la amarán. Los que esperan algo movidito, rutas, explosiones y chicas, la odiarán. Nicolás Winding Refn, un director poco conocido comercialmente, logró una película entretenida pero no tan fuerte argumentalmente. Una lástima.           

2 comentarios:

Rodrigo Moral dijo...

Aunque predominen los adjetivos alentadores, hay algo que me hace sentir que no te gustó taaaaaaanto. Quizá sea cosa mía, qué se yo.
No tengo mucho para agregar (como digo siempre: escribí la crítica, desfilé por setenta y dos mil blogs, mucho más no queda..), sólo que me llamó la atención la comparación con "El Transportador".
No la había pensado. Las referencias que leí, que percibí, que oí, fueron todas a películas de culto. No puedo asentir ante el paralelismo entre "El transportador", "Rápido y furioso", porque las tengo MUY olvidadas (Gracias, Dios!), pero no se me habían ocurrido! Muy interesante.

Saludos!

Gabo dijo...

Es que tenés razón Rodrigo, no me ha gustado tanto pero no me pareció un desastre.Coincido con otras criticas que he leído, su talón de aquiles fue claramente el argumento. Lo que hago con las peliculas tan comentadas, en el caso de que no me hayan gustado tanto, es destacar que fue lo mejor para mi, por eso parece más que nada un critica positiva :P

Curiosamente, apenas empecé a ver Driver me vino a la mente 'El transportador', no es que me guste esa película, solo que ambos protagonistas se dedican a manejar sea cual sea la situación.

Gracias por pasar, leer y comentar!

Abrazo!